Periodistas granmenses constatan en el surco los avances productivos de la empresa "Mártires de Artemisa", de Cauto Cristo. |
Por Daniel García Zayas.
Fotos: Alexander Acosta.
Varios
factores naturales y humanos se han conjugado en la extensa llanura del río Cauto, en el oriente cubano -distante a unos 800
kilómetros al este de La Habana- para favorecer la producción agrícola de la
empresa de cultivos varios y acopio Mártires de Artemisa.
Las lluvias,
la correcta estrategia de plantaciones y el empeño de los labriegos han sido
los protagonistas de las rentables cosechas que reporteros granmenses pudieron
palpar en los campos.
El círculo de
periodistas agropecuarios de la Upec conoció que áreas estatales y privadas sembradas
allí, permitirán comercializar elevados volúmenes de viandas, hortalizas,
granos y frutales, esencialmente en mercados de los municipios Cauto Cristo,
Bayamo y Manzanillo.
Según Alberto
Andrés Figueredo Solano, director de la "Mártires de
Artemisa", las ventas escalonadas por todo el año 2014 repercuten ya tanto
en los ingresos de los campesinos como en la cocina de millares de hogares de
la provincia de Granma.
Señaló, para
que se tenga una idea, que en el primer trimestre se aportaron unas 6400
toneladas de vegetales, que significaron dividendos por más de medio millón de
pesos.
De continuar
ese ritmo productivo, que de hecho debe aumentar a finales de la primavera y en
el período veraniego, posibilitará reafirmar los beneficios de la gestión
socialista en la explotación de las tierras.
CONJUGACION DE INTERESES ESTATALES Y PRIVADOS
Esta
reconocida empresa agrícola cautocristense (figura como la más eficiente entre
sus homólogas del sistema empresarial de Granma) articula atinadamente formas
productivas estatales y particulares.
No han
renunciado a la producción planificada desde la óptica estatal: una Unidad
Económica de Base (UEB) y una Unidad Básica de Producción de Cooperativa (UBPC);
a la vez, prosiguen con su encargo social de prestar servicios de maquinaria,
transporte y aseguramiento a las bases productivas que se le vinculan: dos
Cooperativas de Producción Agropecuarias (CPA) y nueve Cooperativas de Créditos
y Servicios (CCS).
Pero cuando se
habla de incidencia estatal no se remonten a los antiguos procederes en que las
unidades agropecuarias recibían insumos de todo tipo y producían con pérdidas.
"Para aplicar la política de subsidios hay que demostrar que fuerzas mayores,
ajenas a la voluntad de los agricultores, provocaron los problemas en el surco", puntualizó Figueredo Solano.
"En el caso de las áreas bajo
jurisdicción estatal, hemos parcelado la tierra en
fincas. Hombres y mujeres acceden a ellas, y son los responsables de la
búsqueda de semillas, siembras, atenciones y cosechas. Ellos contratan y pagan
la mano de obra que requieran.
"Ayudamos;
nos constituimos en facilitadores de maquinaria agrícola, de transportación y
trámites económico-bancarios; el productor obtiene el 70 por ciento de los
beneficios de la cosecha, pero deben pagar todos los gastos del proceso
productivo".
Centenares de
toneladas de productos agrícolas frescos van
a parar a los centros
comercializadores de Granma.
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NÚMEROS Y PERSONAS
Dados los
actuales precios de los productos agropecuarios cubanos, la lógica consecuencia
esfuerzo/resultado pudiera no percibirse adecuadamente. Quizás se interprete
que a mayor ganancia menos sudor del campesino en las huertas.
Los directivos
de la empresa granmense de cultivos varios y acopio Mártires de Artemisa están
conscientes de que el favorable valor de los vegetales pudiera generar menos
trabajo en el surco.
Ni lo
facilitan ni lo permiten a terceros.
Exigen que el
productor eleve cada vez más sus aportes.
La cuantía de
toneladas de viandas, hortalizas, granos y frutales entregadas a la red
comercial y a la industria procesadora es la que dicta cómo establecer la
política de asignaciones de recursos; desde maquinaria para surcar hasta
camiones para llevar las cosechas hasta los puntos de venta.
Recibe más
quien evidentemente muestre mayores bríos y más eficacia.
Así, los
números y el hombre mantienen una simbiosis altruista.
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