Intelectuales
granmenses y vecinos del Caney de las Mercedes, disfrutaron de la actuación
del
Quinteto Rebelde, institución patrimonial de la Revolución Cubana.Fotos: Alexander Acosta
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Daniel García Zayas
Ni el
sobresalto que provocó en los convocados saber que el "ómnibus asignado al recorrido estaba averiado", ni la lluvia de la noche anterior, impidieron que periodistas y
artistas granmenses unieran voluntades para ofrecer su amor e intelecto a
pobladores de la pre-cordillera de la Sierra Maestra.
La
anunciada visita al asentamiento La Nueve, uno de los muchos que conforman los
núcleos habitables del Caney de las Mercedes, corría el riesgo de no producirse
"por percances imprevistos".
La idea
había surgido en las jornadas de diálogos y creación de alianzas profesionales
entre la Upec y la Uneac. Ambas organizaciones sociales se habían pronunciado
por trabajar unidas para llevar arte y
letras, comunicación e información, a vecinos de comunidades montañosas o
rurales de la geografía de Granma.
Y al
pretender materializarlo los inconvenientes hacían de las suyas. Pero la
voluntad se impuso, y ya con el alba los "hermanados
granmenses" partían a su misión noble y enriquecedora.
FRENTE AL PICO TURQUINO
Periodistas
y artistas granmenses intercambian con
pobladores de la Sierra Maestra.
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La ruta
Bayamo-Bueycito-Bartolomé Masó ofrece deleite por su natural ambiente.
Al
recorrerla, muchos se sorprende al saber que "aquella
montaña es el Pico Real del Turquino, la más elevada de Cuba", anuncia Manuel Lauredo,
veterano reportero.
"Se ve tan
cerca. Yo siempre imagino desde el ómnibus ir a su encuentro; casi puedo
tocarla con las manos, pero está a más de 30 kilómetros", confiesa Marilis Aguilar, actriz del reconocido grupo de teatro
callajero Andante.
Y así,
entre actuales plantaciones cañeras a la derecha y cerros a la izquierda, nos
adentramos en los antiguos dominios de los "barbudos" de Fidel Castro en la última etapa de la lucha insurreccional
cubana. Desde agosto de 1958 y hasta el triunfo de la Revolución, esos predios
eran locaciones de absoluta pertenencia de los revolucionarios.
Es historia
atrayente; y conmueve ver allí, en los propios lares que tanto altruismo
aportaron a la Patria, a lúcidos protagonistas que "optaron por
pelear ante la opresión de la tiranía de Fulgencio Batista", como destacó el agricultor Heberto Bárzaga.
INTELECTUALES Y CAMPESINOS
Asentados a
orillas del río Arroyón, mirando la majestuosidad de la Ciudad Escolar Camilo
Cienfuegos -primera gran obra educacional construida por la Revolución- René
Reyes, el multipremiado director de la agrupación Guerrilla de Teatreros, evoca la creación allí de las escuelas de
instructores de arte. "Fue un momento trascendente para la
formación de los jóvenes y para la cultura cubana", acotó el
artista.
Teresa
Armesto, periodista de la CNC TV Granma, reconoció el papel de hombres y
mujeres que dejaron sus hogares y familias, inicialmente "para pelear el la Sierra" y después
para ir a prepararse para construir un país nuevo, más justo".
Al cabo de
dos horas de anécdotas, referencias y risas, Generoso Jerez, octogenario y rudo
labriego del Reparto Liberación, afirmó que "cada palabra
me encandiló el corazón", aludiendo a la emoción que le
provocaban los recuerdos y "los conocimientos de cosas de Cuba que
no sabía".
QUINTETO REBELDE
Tras las
historias, la actuación del entrañable del Quinteto Rebelde, institución
patrimonial de la Revolución Cubana. Con sus uniformes guerrilleros de color verde olivo
hicieron vibrar a reporteros, artistas y pobladores.
Entre
canciones, Alcibiades Medina detalló "cómo Fidel
nos hizo comprender que nuestras armas eran poderosas, porque eran ideológicas".
Rubén La O
reconoció que sus conocimientos de música eran escasos. "Aprendimos música de oídos", subrayó.
De esta
manera concluyó este encuentro entre pensadores y orfebres de las artes y las
letras y los apasionados pobladores de la Sierra Maestra. Bastión otrora,
baluarte en el presente.
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